Madrid, finales del siglo XIX. A un patio de barrio popular llega una nueva vecina, Mari Pepa. Guapa, desenvuelta y risueña, no tarda en encandilar a todos los hombres de la corrala. Sólo uno se resiste. Felipe, precisamente de quien Mari Pepa se enamora. Entretanto, las mujeres celosas de Mari Pepa deciden escarmentar a sus maridos proporcionándoles, en una noche de verbena, una cita con "La Revoltosa". A la misma hora coinciden en la puerta de Mari Pepa los admiradores, y Felipe, que, cansado de disimular su amor, acude a aclarar las cosas con ella. Sin embargo, ella deberá casarse con el perista Don Leo para ayudar a su padre, un jugador borracho, que ha cometido un robo y ha empeñado las joyas de la familia.